Sangría es el nombre reconocido a nivel mundial que se le da a una bebida proveniente de España que resulta de mezclar vino tinto con fruta y zumos de frutas y especias.
El término parece tener etimología de la voz inglesa sangaree, la cual, parece inspirado en el vocablo español sangre para denominar esta bebida por su color. Así, la sangría, que era llamada «limonada del vino» en algunas colonias españolas de América, recuperó su origen idiomático al extenderse su consumo en nuestro país a partir de 1850.
A la hora de servir hoy día se le ponen cubitos de hielo y se bebe acompañada de trozos de fruta fresca, pero no siempre fue así.
Roma
En la Roma antigua era muy común beber vino en lugar de agua, ya que el alcohol mataba los gérmenes frecuentes en el agua contaminada de la época. Tanto niños como adultos tomaban diariamente vinos que se especiaban para dar distintos sabores agradables al paladar. A esta bebida se le llamaba grog o hippocras.
Esta costumbre se fue expandiendo por el resto de Europa, incluyendo la península ibérica, donde empezó a llamársele sangría al vino tinto por su coloración roja.
En los siglos XVIII y XIX, en Francia e Inglaterra se empezó a preparar un tipo de sangría que empleaba uvas francesas. Además, se hacía sangría blanca, sangría espumante y sangría a base de melocotones, que se llamaba zurra.
Pero entonces, ¿cómo nace la sangría que conocemos? Una de las fuentes históricas más fiables, se remonta al 1800, como una bebida de los campesinos de España y Portugal, que solían prepararla con los productos de la tierra a su disposición: vino, melocotones, manzanas y cítricos.
Según otra versión, se remontaría al 1700 como la original idea de un grupo de marineros (o piratas) británicos. Desembarcados en las Antillas, idearon la manera de eludir la prohibición de beber alcohol: “disfrazaron” el ron español con miel, especias y trozos de frutas locales, a fin de que se viera como un inocente zumo de frutas.
Andalucía
Aunque en el Medioevo ya en todos los países europeos, incluyendo España, se tomaba vino especiado, lo cierto es que añadir las frutas cortadas se produce por primera vez en Andalucía.
Esta no es la mejor región para las uvas, pero cuenta la leyenda que los lugareños le colocaron frutas frescas cortadas a una tina de vino de baja calidad y la dejaron estar por unos días. Notando que el vino mejoraba considerablemente, decidieron seguir experimentando al agregarle especias, azúcar, brandy y unas ramas de canela. El resultado: descubrir una nueva bebida de exquisito sabor, color y fragancia.
Sangría en la actualidad
En la actualidad, según dictan las normas europeas, toda la sangría debe hacerse en España o Portugal y tener menos del 12 por ciento de alcohol por volumen. Sin embargo, se considera que la mejor sangría del mundo es la que se hace en los hogares de la península y en cualquier lugar del mundo en realidad.
En la historia de la sangría vemos cómo de ser un simple vino especiado pasó a convertirse en esta deliciosa bebida a base de vino tinto y frutas frescas que es altamente apreciada en todos los países del mundo sin importar el clima o la época del año.
«La comida es la parte material de la alimentación, pero el vino es la parte espiritual de nuestro alimento».
– Alejandro Dumas.
